| 
 Evidentemente era la hora del almuerzo. Y si quedaba 
                  alguna duda sobre de dónde sacaban los choripanes que 
                  se comían allí a la vuelta, creo que ha sido despejada. 
                  Los que preferían ser atendidos por mozos para degustar 
                  una parrillada y podían cubrir el gasto iban a la fonda 
                  que estaba cruzando la calle (Lisandro de la Torre) y se ponían 
                  cómodos. Hermosos caballitos ¿no les parece? ¡Los 
                  de la izquierda de la foto inferior, claro!  
 |