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El Año Polar Internacional

Investigadores de más de 60 países intentarán este año comprender mejor los polos. El aumento de casi 3° C en la temperatura mínima del continente antártico registrado en los últimos cincuenta años, el desprendimiento de grandes campos de hielo, el retroceso de glaciares y otros fenómenos que se pueden observar, profundizaron la preocupación de la comunidad científica mundial. Durante este Año Polar Internacional se tratará de investigar estos fenómenos que siembran serios interrogantes sobre las consecuencias a futuro.

El Año Polar Internacional (IPY) es una gran campaña mundial de investigaciones y observaciones polares, organizada y coordinada por el Consejo Internacional de Ciencia (ICSU) y la Organización Meteorológica Mundial (WMO). Ambas organizaciones nuclean a la mayoría de las naciones del mundo.

El objetivo es profundizar los conocimientos sobre los polos, dada la íntima influencia que estas regiones tienen sobre el clima, el medio ambiente y la vida en todo el planeta.

Las regiones polares son componentes integrales del sistema terrestre como disipadores de calor del sistema climático, ambas regiones responden e impulsan cambios en otra parte del planeta. Se conectan al clima global, el nivel del mar, los ciclos biogeoquímicos, los ecosistemas y las actividades humanas. Son reservas de pesca y minería. Albergan grandes cantidades de hielocapaces de causar un aumento considerable del nivel del mar en el mundo en condiciones de calentamiento global. Representan grandes sumideros de carbono que pueden mejorar la producción de dióxido de carbono antropogénico y son también el hogar de personas que contribuyen a la diversidad cultural del planeta.

Así como las regiones polares tienen influencia en los procesos globales, los procesos globales también tienen influencia en los polos. Los ejemplos incluyen la formación del agujero de ozono, la acumulación de contaminantes en el Ártico, la influencia de la conectividad de la comunicación satelital global en los residentes polares y el impacto de las variaciones mundiales de precios en la explotación de los recursos.

Se prevé que el 2007-2008 dejará un legado de sitios, instalaciones y sistemas de observación para respaldar las investigaciones y el monitoreo polar en marcha. Se fortalecerá la coordinación internacional de investigación y mejorará la colaboración y cooperación internacional en las regiones polares.

Las nuevas capacidades tecnológicas representan un potencial para realizar mayores avances en la ciencia polar. Las mismas incluyen teledetección satelital, instrumentos autónomos y plataformas capaces de operar en condiciones extremas de frío y oscuridad, sistemas de comunicación global de alta banda ancha y Simuladores de Sistema Terrestre numéricos de alta potencia.

Conocer en profundidad la vinculación e interacción de los polos con los fenómenos climáticos globales es uno de los desafíos que plantea el Año Polar Internacional que se llevará a cabo desde el 1° de marzo de 2007, hasta el 1° de marzo de 2009.

Fuente: Secretaría de Ciencia, Tecnología e Innovación Productiva (SeCyT)